Article de Diari de Tarragona
Agresiones, trato discriminatorio, falta de deportividad... Recordamos lo sucedido ese 21 de junio del 2014 en el Municipal de Llagostera
Foto: Lluís Milián
Publicado: 19:55 - 17/11/2015
Este domingo Nàstic y Llagostera se volverán a encontrar en un terreno de juego. A pesar de que los tarraconenses consiguieron el ascenso a Segunda A la temporada pasada y las heridas parecían cerradas, el recuerdo de todo lo que pasó aquel 21 de junio de 2014 en el Municipal de Llagostera se mantiene intacto. Repasamos los agravios que sufrió el Nàstic por parte del club gerundense y su afición.
- Los descartados: Un tweet (borrado) con foto de un jugador del Llagostera después del partido de ida en el Nou Estadi encendió la polémica. En el comentario, el futbolista se quejaba que el Nàstic no había reservado asientos para los descartados de su equipo en la grada del Nou Estadi, por lo que se tuvieron que sentar en las escaleras todos juntos. El Nàstic afirmó que era falso, que sí que tenían plaza, pero que debido a la gran afluencia de público debían sentarse separados. En el partido de vuelta en Llagostera, los jugadores del Nàstic no sólo no tuvieron asiento, sino que la única opción que se les dio fue quedarse de pie detrás de la línea de fondo.
*Detrás de una valla y a dos metros de la línea de fondo tuvieron que ver el partido los jugadores descartados del Nàstic. Foto: Lluís Milián
- Entradas: Días antes del partido el Llagostera puso a la venta entradas para el partido. Aficionados del Nàstic se desplazaron hasta la localidad para adquirirlas, pero cuando el club gerundense se percató de que terminarían en manos granas, las retiró de la venta y las facilitó únicamente a sus socios y los del Girona, causando la indignación entre los tarraconenses movilizados.
*Cola de los aficionados del Nàstic delante de las taquillas del Municipal de Llagostera antes del choque. Sólo unos pocos consiguieron entrada. Foto: Lluís Milián
- Fan Zone: Ante la previsión de ‘Marea grana’ a Girona, el club pidió la instalación de una Fan Zone para los seguidores que no tuvieran entrada para el partido. La petición fue denegada. Al final, los seguidores granas sin entrada vieron el partido en diferentes bares y locales de los alrededores. En algunos, crearon disturbios y altercados.
- Más entradas: A la llegada al campo, la delegación del Nàstic, entre los que estaba el alcalde de la ciudad, se encontró que no había entradas para todos. El presidente Josep Maria Andreu, como muestra de rechazo por el trato recibido, decidió comprar una entrada en la reventa junto con Ballesteros e irse a la zona de aficionados tarraconenses.
*En el centro, con camisa y de pie, el presidente del Nàstic, Josep Maria Andreu, y el alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, mezclados entre los aficionados del Nàstic. Foto: Lluís Milián
- Agresión al delegado del Nàstic: El presidente del Nàstic, Josep Maria Andreu, explicó este lunes que el delegado del equipo, Josep Maria Grau, sufrió una agresión antes del partido. No quiso concretar por parte de quien, pero comentó que no trascendió públicamente porque no se denunció a los Mossos.
- Agresiones a jugadores y artimañas: Durante la prórroga y ya con el Llagostera ganando por 3-1 la afición tomó partido. En un estadio que no requería las condiciones de seguridad mínimas exigibles para un partido de esas características, incluso seguidores locales agredieron a los jugadores del Nàstic… ¡con el partido en marcha! El lateral Juanjo no pudo sacar de banda al ser ‘taponado’ por detrás por un espectador, iniciando un barullo entre jugadores de ambos equipos, cuerpos técnicos y seguidores. El árbitro observó, no tomó decisiones y apostó por el “sigan, sigan”. A partir de ahí, constantes balones al terreno de juego para cortar el partido. Algunos, lanzados directamente desde el banquillo local.
*El lateral del Nàstic, Juanjo, a punto de sacar de banda. Un seguidor le toca el balón por detrás. Fue el inicio de una trifulca. Foto: Lluís Milián
- Carga policial: Al terminar el choque los Mossos d’Esquadra cargaron contra los aficionados del Nàstic, algunos de los cuales intentaban salir del estadio. Hubo heridos que tuvieron que ser atendidos por los servicios médicos e incluso el entrenador del Nàstic, Vicente Moreno, estuvo a punto de ser agredido por los agentes. La actuación policial causó revuelo también a nivel político, con una carta de queja del alcalde Ballesteros al Conseller d’Interior, Ramon Espadaler. También hubo peleas entre seguidores de los dos equipos durante la invasión de campo por la celebración del triunfo local.
*Los Mossos cargaron con dureza contra la afición del Nàstic al final del partido. A punto estuvieron de agredir a algun jugador y miembro del cuerpo técnico. Foto: Lluís Milián
- ‘Calvos’: A punto de finalizar la prórroga y con el balón en juego, algunos seguidores locales entraron en el terreno de juego, en la zona del córner en la que estaban los aficionados del Nàstic y, ni cortos ni perezosos, se bajaron los pantalones enseñando el culo hacia la grada, en actitud de burla y desprecio.
